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RSE en tiempos de crisis
19 Sep, 2011

RSE en tiempos de crisis

Quiero aprovechar esta oportunidad para reflexionar sobre algunos aspectos de la responsabilidad social empresarial en tiempos de crisis e invitarlos a realizar el proceso de autoevaluación como una oportunidad para identificar ventajas competitivas importantes para afrontar la recesión.

Momentos como este nos permiten ser concientes del potencial que como alianza de empresas tenemos para mantener nuestro compromiso con la sociedad, iniciando con la sostenibilidad del negocio, y promoviendo un impacto positivo en el desarrollo del país en términos económicos, sociales y ambientales.

Debemos tener claro que el camino de la RSE no es un camino cortoplacista.  El manejo responsable de la relación con nuestros grupos de interés (Stakeholder Management) provoca prácticas más eficientes y eficaces que se traducen a mediano y largo plazo en valor para la empresa, sumando capital social, ambiental y financiero.

Esto último no resuelve los efectos inmediatos de la recesión que vivimos pero sí nos permite confiar más en la sostenibilidad futura de la empresa. Si pensamos el hoy por el hoy no resolvemos nada, pero por ejemplo si al recortar presupuestos pensamos en qué forma podemos afectar lo menos posible a nuestros grupos de interés talvez estemos ganando excelentes aliados para el futuro: empleados más comprometidos con la organización, clientes más satisfechos con nuestros productos o servicios, proveedores fieles a nuestra empresa, comunidades más concientes de nuestro esfuerzo y agradecidas con nuestra ética y transparencia. 

No hay una fórmula mágica para cada empresa durante la recesión, la creatividad y la innovación son valores que nos abren la puerta a posibles alternativas que nos permitirán afrontar de forma responsable los malos resultados del mercado.

Es así que los invito a utilizar las herramientas que ponemos a su servicio para autoevaluar y medir sus procesos desde la óptica de la responsabilidad social empresarial.  La Autoevaluación y el Bechmarking en RSE aterrizan en procesos de mejora continua que nos apoyan en la implementación de un modelo de gestión de negocios responsable, estandarizado a nivel regional por la Red Centroamericana de organizaciones promotoras de la RSE.

Herramientas como estas pueden ser estratégicas para dar luces de cómo afrontar situaciones adversas.  La Autoevaluación es una autopercepción de cómo están nuestros procesos, productos y servicios alineados con los públicos de interés y nos permite empezar a gerenciar pensando en un futuro competitivo dónde las prácticas responsables, a la luz de la crisis mundial, ya no son un “acto de buena voluntad” sino que son una exigencia del mercado que busca asegurar su sostenibilidad en el tiempo.

Ejemplo más claro no podemos tener como son los requisitos del mercado en esta materia, en el marco del Acuerdo de Asociación que actualmente negocia la Unión Europea con la región centroamericana.

Con esto también quiero hacerlos reflexionar sobre el alto valor de la responsabilidad empresarial vista adecuadamente, no como un gasto financiero, sino como esencia del negocio.  Lo peor que podemos hacer ahora es renunciar a ello cuando precisamente la falta de principios éticos, transparencia y un manejo responsable de los recursos fueron de las principales causas de esta crisis.

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