En el 2011, AED identificó la necesidad de las empresas de contar con una metodología práctica y sencilla para reconocer, medir, reducir, compensar y responsabilizarse de su impacto ambiental.

Como respuesta, la organización creó Eco Eficiencia Empresarial, una plataforma colaborativa, con herramientas especializadas y reconocidas a nivel internacional, para fortalecer la competitividad de los negocios, mediante una gestión ambiental sostenible.

AED diseñó una mesa de trabajo, para el avance conjunto de las empresas en diferentes parámetros, en sesiones de trabajo mensuales y para compartir mejores prácticas con el objetivo de reducir la curva de aprendizaje y acelerar el tiempo de implementación.

Eco Eficiencia Empresarial contó el apoyo de la Fundación Avina, Fundación Konrad Adenauer, la Embajada de los Países Bajos, el Programa Bandera Azul Ecológica (PBAE) y junto con la empresa Holcim, que contribuyó al desarrollo la primera herramienta de medición de huellas ambientales.

Desde sus inicios en el tema ambiental, AED se alió con el Programa Bandera Azul Ecológica con el objetivo de escalar su impacto involucrando a más empresas. Gracias a esta colaboración, se desarrollaron herramientas para crear y fortalecer la categoría Cambio Climático del PBAE, dirigida a organizaciones.

En el 2014, AED colaboró con la Red INTEGRARSE para regionalizar la iniciativa y comprometer y capacitar a las empresas centroamericanas la gestión de su impacto ambiental. Las herramientas se compartieron con Fundarhse en El Salvador, CentraRSE Guatemala y Unirse Nicaragua con la meta de llegar a 500 nuevas organizaciones.

En el 2020, gracias a la Fundación Konrad Adenauer, se sistematizó el conocimiento años en un elearning disponible de manera gratuita. A la fecha, más de 158 empresas en Costa Rica han empleado esta metodología para medir y gestionar sus impactos ambientales, con lo que se ha logrado:

• Disminución en el consumo eléctrico equivalente a más de 4000 toneladas de CO2 no emitidas.
• Reducción del uso de combustibles fósiles equivalente a más de 60 mil toneladas de CO2 no emitidas.
• Ahorro de 2,3 millones de metros cuadrados de agua, equivalente a 921 piscinas olímpicas.
• Disminución en el consumo de papel equivalente a 761 toneladas menos de papel, lo que implica más de 21 mil árboles salvados
• Estos impactos suman más de 64 millones de dólares ahorrados.