Desde grandes pensadores y luchadores sociales como Martin Luther King Jr, quien compartió una vez esta frase: “La pregunta más repetida y urgente es: ¿qué estás haciendo por los demás?”, hasta las citas más reconocidas de las doctrinas religiosas como: “amarás a tu prójimo como a ti mismo”, concuerdan en el mismo punto: nuestra responsabilidad de cuidarnos, cuidar a los demás y velar por el bienestar de nuestro entorno y todo lo que vive en él.

Es claro que todos y todas debemos responsabilizarnos con lo que sucede en nuestro entorno, nos toca a todos y a todas ponerle y ponernos a trabajar.

Pero… ¿Cuál es mi responsabilidad y sobre todo… Qué es ponerle?

Según el diccionario, entre tantas definiciones encontradas, podemos definir ponerle como la “disposición de hacer uso de una cualidad o de una habilidad con un fin determinado”. Ahora sí, estando enterados de que es ponerle, viene la siguiente pregunta:

¿Por qué vamos a ponerle?

Muchos le ponen ayudando de manera voluntaria en diferentes organizaciones o comunidades, debido a que han desarrollado una sensibilización hacia una o varios problemas sociales en específico y han reconocido su responsabilidad con su entorno.

Esta sensibilización e identificación con una situación de injusticia genera un sentimiento de solidaridad que nos llama a ponerle. Si sentís que alguna causa te mueve, te llama o te identifica, casi estás listo para empezar a ponerle. Ya sabés por dónde ir. Ahora responsabilizate. Vos podés hacer algo.

Entonces, ¿cuál es el primer paso para ponerle?

Si ya sabés que te preocupa y te interesa trabajar por alguna causa determinada, es hora de buscar de qué manera lo vas a hacer y dónde.

Una de las formas más importantes e, incluso, más sencilla de cómo podés involucrarte y trabajar por una causa es el voluntariado. El voluntariado es poner a disposición tu energía, habilidades y talento para ayudar a resolver un problema en forma desinteresada. El voluntariado te permite ser parte de la solución.

¿Y dónde puedo hacer voluntariado?

En nuestro país existen muchas posibilidades para realizar actividades de voluntariado. Es cuestión de conocer qué podés aportar y las necesidades del lugar o comunidad que deseás ayudar. Por ejemplo, en nuestro país podés contactar organizaciones en el directorio o en Internet y acudir a realizar voluntariado en lugares como:

• Hogares de ancianos.
• Parques Nacionales.
• Organizaciones comunales.
• Programas de voluntariado universitario.
• ONGs desde temas ambientales, políticos, entre otros.

Si por alguna razón querés realizar voluntariado pero, por limitaciones de tiempo, físicas, transporte, entre otros, pensás que no se puede ayudar, estás equivocado. Siempre podés ayudar. Colaborá desde donde sea que estés por medio del teléfono o una computadora, apoyando en la coordinación de actividades o en la gestión de la organización que ayudás o la movilización de la comunidad a la que pertenecés.

También es muy importante considerar todos los beneficios que te puede traer voluntariado como:

• Satisfacción personal.
• Crear contactos y hacer amigos.
• Mejora nuestras habilidades sociales.
• Poner en práctica y generar experiencia de nuestros conocimientos profesionales.
• Recreación, además de realizar aportes por medio del aporte de nuestros talentos e ideas.

No pongás excusas. Podés ponerle de mil maneras. Usá tus talentos para cuidarte, cuidarnos y cuidar el planeta. Ya sabés qué tenés que hacer, vamos…  ¡PONGÁMOLE!